Mejor Rosado 2020
Bodega Ostatu, perteneciente a la Rioja Alavesa, consiguió el primer puesto con su Ostatu Rosé, en la categoría de rosados. Una bodega de tradición familiar, cuatro hermanos, que heredaron la pasión por el mundo del vino tras generaciones en la familia trabajando las viñas y que ahora continúan la aventura de comercializar sus propias elaboraciones como también lo hicieron sus padres. Conservando la filosofía que vio nacer las primeras elaboraciones de Ostatu, aportan un aire fresco al proyecto de sus progenitores combinando tradición e innovación en sus elaboraciones y en el cuidado del viñedo.
La bodega se sitúa en Samaniego, corazón de la Rioja Alavesa, conserva el edificio señorial del SVXIII que fue el punto de partida de lo que hoy constituye Ostatu. Pero además, cuenta con nuevas instalaciones adaptadas a los tiempos que corren entorno al mundo del vino, el wine-bar o el Txoko de Ostatu son claros ejemplos de ello. Una segunda generación que supone conservar el origen mirando siempre al futuro y asegurando la continuidad de la filosofía que aprendieron de sus padres. Sin olvidar el origen de todo ello: la viña, esta bodega cuenta con 36 ha de viñedo propio, divididas en 50 parcelas ubicadas en diferentes alturas y orientaciones, lo que contribuye a una gran gama de elaboraciones, unas elaboraciones que ya desde el punto de partida cuentan con personalidad propia.
Ostatu Rosé, es elegante, fino y con una marcada corriente atlántica. Con notas frutales en nariz a frutos rojos silvestres, aromas complejos y frescos como pueden ser el hinojo y la menta. En boca es persistente, envolvente, agradable y untuoso, con una frescura característica de los vinos atlánticos que los hace ligeros y “fáciles de beber”.
Una copa de Ostatu Rosé siempre será buena compañera de un bonito del cantábrico además de combinar a la perfección con otro tipo de conservas. Otra opción son los arroces suaves o la pasta.